En este caso fue Focaliza, la empresa que certificó que el Movimiento Al Socialismo (MAS) estaría quedando sin las alcaldías de las principales urbes del país. La gran particularidad de este sondeo, es que fue de manera presencial y presentada por las redes Uno y Bolivisión.

En cuanto a las gobernaciones, los tres aspirantes más favorecidos están lejos de ganar los comicios y se avizora una segunda vuelta, cuando faltan 14 días para las elecciones subnacionales.

Si hablamos de la ciudad de La Paz, el candidato de Somos Pueblo, Iván Arias (40,2%), lleva diez puntos al postulante del Movimiento Al Socialismo (MAS), César Dockweiler (30,3%). Por su parte, en la vecina ciudad de El Alto. la candidata por Jallalla, Eva Copa, se consolidó con el 72,9% de intención de voto, seguida por Zacarías Maquera (MAS) con 7,7%.

Si vemos lo que ocurre en Cochabamba, el exalcalde Manfred Reyes Villa consiguió el 52,2% de intención de voto, seguido de Nelson Cox (MAS) que tiene 14,2%. En Santa Cruz, hay un empate virtual: Johnny Fernández (UCS) obtiene 33,9%, seguido de Gary Áñez (CC) que tiene 30,9%.

En cuanto a Gobernaciones, las victorias en primera vuelta parecen utópicas. En La Paz, Franklin Flores (MAS), tiene 21,2% de intención de voto, seguido de Santos Quispe, el hijo del difunto Felipe Quispe El Mallku, con 17,4%, y Rafael Quispe de Somos Pueblo con 16,5%.

En Santa Cruz, el ex cívico Luis Fernando Camacho tiene 53,3% de apoyo y Mario Cronenbold, 26,1%. En Cochabamba Humberto Sánchez (MAS) tiene 36,7% y Juan Flores (UPC), 6,6%.

Fuene: cabildeodigital

La ministra española de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, ha declarado este lunes que la Unión Europea “no puede reconocer el resultado como legítimo o representativo” y España tampoco puede reconocer este resultado” tras unas elecciones legislativas en las que “no se han respetado estándares internacionales mínimos para un proceso creíble”.

“No es ninguna sorpresa para nadie, es lo que venido manteniendo en los últimos meses”, ha agregado González Laya sobre los comicios celebrados el domingo en Venezuela en los que el chavismo venció sin sorpresas en las elecciones parlamentarias, marcadas por la alta abstención y el llamamiento al boicot que hiciera el sector de la oposición que respalda al líder Juan Guaidó.

La jefa de la diplomacia española ha asegurado también que José Luis Rodríguez Zapatero “es libre de expresar su opinión”, pero ha desoído la recomendación del expresidente del Gobierno español, que ha pedido a la UE que “haga una reflexión” sobre su posición respecto a Venezuela.

“El señor Rodríguez Zapatero es un ciudadano libre de expresar su opinión, la ha expresado y yo la respeto”, ha dicho González Laya en rueda de prensa posterior a un consejo de ministros de Exteriores de los países de la Unión Europea.

La titular española, no obstante, ha subrayado que España mantiene “su disposición” a favorecer un “proceso de transición para buscar una solución a la crisis” a través de “elecciones que sean creíbles, libres y justas”.

En ese sentido, González Laya ha señalado que hasta el próximo 5 de enero, cuando se instalaría la nueva directiva de la Cámara, se abre “un proceso de discusión para ver cuál va a ser la postura europea con respecto a la Asamblea Nacional actual y con respecto al presidente encargado, Juan Guaidó.

De cara a esa reflexión, España ha planteado que se debe de “mantener unidad europea y convergencia internacional”, aportar una “respuesta consistente con derecho internacional” que “envíe una señal política clara” y garantizar que la UE “pueda mantener la capacidad de apoyo a venezolanos para alcanzar una solución política”.

En ese sentido, la ministra española ha hecho un “llamamiento muy claro” para que “el régimen y la oposición” lleguen a “un acuerdo de mínimos con respecto a la respuesta humanitaria que necesita el pueblo venezolano en estos momentos”.

“España sigue con enorme preocupación el deterioro de la situación humanitaria en Venezuela”, ha dicho la ministra, quien, preguntada por el papel de España en el debate, ha expresado que en el Consejo se “escucha con atención lo que diga España y lo que diga Portugal, como países iberoamericanos”.